Cada encuentro es un aprendizaje

¡Muy buenas! ¡Aquí seguimos fenomenal! Ha sido una semana intensa de talleres...el primero fue de espiritualidad, caridad y compromiso, a las distintas Pastorales de la Iglesia y luego dos días de formación a los adolescentes de Selvas sobre la trata de personas, drogas y liderazgo. Siempre es una alegría compartir algo de lo aprendido y aprender de lo compartido.

Hay cosas que me siguen impresionando, por más que lo vea, la generosidad de quien menos tiene... pero sobre todo la alegría con que te dan, la gente mas humilde, lo mejor de lo que tienen...(fruta de la pasión, mangos, cocos, piña...) un dia volvimos con un saco de las visitas a los bateyes, pero sobre todo con un corazón lleno....me gustaría tanto ser asi de desprendida. Aquí tienen muy bien aprendido que lo material no tiene ningún valor frente a lo espiritual. Bienaventurados los pobres de espíritu...

Me impresiona la vocación de la profe Meme, en la Higuera, qué mujer más entregada...nos contaba que le gustaria tener mas dinero para comprarle a sus alumnos, zapatos, pantalones, mochila y cuadernos y asi no tardarían un mes en llegar al colegio; justo los que mas lo necesitan (no van hasta que no tienen el uniforme y los útiles escolares, es decir hasta que tienen el dinero para comprarlo). Fuimos a preguntarle por nombres de alumnos a los que becar, (con buena media y buen comportamiento, que no recibieran otras ayudas y con escasos recursos), pues en sus vacaciones, se fue al colegio a recoger los listados, revisar las notas y hacernos una lista bien hecha. Y tan feliz y realizada. Hay tanto bien que hacer, y cuántas excusas nos ponemos.

Otra cosa que me maravilla es la paciencia de la gente, pero sobre todo su ¡no rendirse! luchando hasta el final, ya sea para sacar un trozo de llave que se ha quedado en una cerradura, como para cavar un pozo, y conseguir agua para la comunidad. En la comunidad de las Cuchillas después de contratar una máquina bastante cara, en el lugar que han ido a buscar agua, sólo había agua para tres familias. Al día siguiente ya estaban donde el Gobernador para pedirles una perforadora pública. ¡Si! a Dios rogando, pero con el mazo dando.

Algo que pasa mucho aquí, es la multiplicación de los panes y los peces, sí, el milagro de compartirla comida. La gente siempre es bienvenida, da igual cuantos vengan a casa a la hora de comer o cenar, siempre hay comida para todos y sobra. Es más importante llenar el corazón con el compartir que la barriga.

Un gran problema de los haitianos en Dominicana, es que no están declarados. Los papeles, aquí son tan inhumanos como en Europa o más... ¿Cuándo aprenderemos a vivir sin tantas fronteras y a acoger con los brazos abiertos al que viene? No os podéis ni imaginar el sufrimiento que eso supone, no pueden estudiar, ni pedir una jubilación...no es justo. Dios no creó el mundo con fronteras, las hemos ido construyendo nosotros cada vez más altas, y con más obstáculos, para proteger nuestro propio bienestar, sin pensar en la situación del hermano que viene de fuera. El otro día había una chica que llevaba 12 años intentado conseguirlos, su cara lo decía todo.

Ahora vengo de un entierro, el hermano de nuestro compañero de la radio. Es increíble como unen ese dolor tan desgarrador, por la despedida de un hermano joven, con esa esperanza y confianza en Dios, que no les desampara, al que le dan las gracias por hacerse presente a través de los amigos y familiares y con esa fe que ha partido a la casa del Padre y Dios le ha acogido en sus brazos. Descansa en paz.

El otro día también fui a unos últimos rezos, aquí es costumbre hacer 9 días de rezos después de la muerte de alguien de la comunidad, en su casa. Me parece que es una bonita forma de acompañar a la familia en su duelo: cantamos, rezamos...

Hoy hemos estado en la cárcel de El Seibo, celebrando el día del padre con una Eucaristía. El otro día muchos nos decían que el hecho de ser padres les daba fuerzas para cambiar, que sus hijos eran su mayor alegría (este domingo, los que quieran y puedan irán a verles). Después de la Eucaristía, una de la pastoral les ha dicho que tienen que crear una comunidad allí dentro, donde reflexionen la Palabra, recen juntos y se comporten como hermanos. Cuando nos íbamos, uno nos ha dicho que lo iba a hacer. Habíamos llevado un montón de bolsas con ropa y productos de higiene para entregarles por el día del padre. Había muchas, pero la falta de organización, que algunos internos se llevaron más de una y que algunos no se ponían donde les decían han hecho que los que se encargan de la seguridad cogieran un palo de madera...estaba todo el mundo bastante tenso, la verdad, porque ayer se escaparon dos y no saben como, (al hacer el recuento, se dieron cuenta) hoy había un coronel nuevo...pero lo peor ha sido cuando se estaban acabando las bolsas; no había más que manos y caras de desesperación. Allí hace falta mucho de todo, gracias a la generosidad de la gente hemos llevado bastante, espero que lo que no les valga, lo repartan con el que no tiene. Muchos querían zapatos y casi no había.

En la cárcel hemos podido hablar con tres de los campesinos de la Culebra encarcelados injustamente. Había uno bastante desanimado, no solo le metieron en la cárcel por confusión (buscaban a otro y le metieron a él), sino que además se murió su mamá, y le iban a dar el permiso para salir, pero resulta que le declaró otra persona y como no coincidían los apellidos, no se lo dieron. No hay palabra de consuelo suficientes aquí en la tierra, así que le dimos el mejor abrazo que pudimos y si Dios quiere, mañana iremos a los últimos rezos de su madre. Ojalá se haga justicia pronto y les dejen libres. Aunque se cocinan ellos, decían que tenían problemas de estómago...las condiciones de allí adentro son bastante inhumanas.

Espero que estéis disfrutando mucho del verano. Un besazo,

Belén Sánchez?
Voluntaria Misionera en Misión?