Últimos días en Koribeni
La aventura llega a su fin, pero no por ello hemos dejado de exprimir hasta el ultimo momento en esta preciosa tierra. Esta última semana hemos atravesado el temido y bello Pongo de Mainique, hemos tenido la oportunidad de compartir brevemente con la comunidad de Timpia, y nos hemos despedido de la comunidad de Koribeni y de todas las personas que han cuidado tanto de nosotros que nos han hecho sentir como en casa durante estos dos meses.
Con todo grabado en el corazón, Belén se despide por todos.
La aventura llega a su fin, pero no por ello hemos dejado de exprimir hasta el ultimo momento en esta preciosa tierra. Esta última semana hemos atravesado el temido y bello Pongo de Mainique, hemos tenido la oportunidad de compartir brevemente con la comunidad de Timpia, y nos hemos despedido de la comunidad de Koribeni y de todas las personas que han cuidado tanto de nosotros que nos han hecho sentir como en casa durante estos dos meses.
Con todo grabado en el corazón, Belén se despide por todos:
¡Gracias!
Gracias a Dios por traernos hasta aquì, a vivir una experiencia tan gratificante y tener la oportunidad de compartir la fe y la vida con nuestros hermanos de Perú, gracias por hacerte presente en cada uno de éstos y acompañarnos en el camino. "Tuve hambre y me distéis de comer, tuve sed y me distéis de beber, enfermo y me vinistéis a ver..."
Gracias Koribeni por la acogida, hemos aprendido mucho de vosotros y nos llevamos un poco de cada una de las personas que aqui hemos conocido, frailes, hermanas, comunidades, profes, niños...habéis dejado huella. "Vosotros sóis la sal de la tierra y la luz del mundo"
Gracias al Padre Roberto por ser ese Evangelio vivo, por llevarnos a sitios increíbles con gente tan acogedora que nos enseña a vivir feliz con tan poco. Gracias por enseñarnos a buscar la verdad en camino, por tu sentido del humor, tus consejos y tu paciencia. "No andéis preocupados ni agobiados sobre qué comeréis o con qué os vestiréis..."
Gracias Fray Juan por estar siempre dispuesto a servir, por tu testimonio de vida, por pensar tanto en los demás, enseñarnos a comer rápido y por tu ilusión jugando al parchís. "El que quiera ser grande entre vosotros, que sea vuestro servidor"
Gracias Maria, por tu cariño al hacer la comida, por tu sonrisa, por estar siempre tan atenta y por cuidarnos tanto. "Amaros los unos a los otros como yo os he amado"
Gracias a las hermanas, por estar ahí,. por abrirnos las puertas y compartir los que sóis con todos. "Lo tenían todo en común"
Gracias a los compañeros del camino: Raquel, Carmen, Jorge y Alexia, ha sido un auténtico placer compartir la misión con vosotros, las risas, las caminatas, los momentos de oración y compartir vida, sin vosotros nos habría sido lo mismo. "Id al mundo entero y predicad el Evangelio"
Gracias a todos los que han hecho que esto sea posible: Selvas amazónicas, los misioneros...
Unidos en misión: "Llevame donde los hombres, necesiten tus Palabras, necesiten mis ganas de vivir, dónde falte la esperanza, dónde falte la alegría, simplemente, por no saber de Tí"