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El Blog de Misioneros Dominicos - Selvas Amazónicas

Las perlas de Malabo

El testimonio de Lourdes, voluntaria misionera: el verano en el que descubrió tres perlas que dejaron huella en su corazón

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Las perlas son joyas naturales de una belleza inigualable. Nacen en la profundidad de los océanos, a menudo escondidas y cerradas en el interior de las conchas de las ostras, sin mostrar su esplendor al mundo exterior.
Cuesta encontrarlas y, cuando se descubren, es como si el mar hubiera guardado un secreto precioso. Pero cuando la ostra se abre, la perla revela su luminosidad y resplandor, brillando con una luz suave y cautivadora que hipnotiza a quien la ve. Las perlas son símbolo de algo valioso y bello que, a pesar de estar a veces oculto, tiene el poder de iluminar y conmover cuando se muestra.
verano-util-testimonio-malabo-1-normalEn mi experiencia en Malabo, Guinea Ecuatorial, he encontrado perlas humanas de un valor incalculable. Perlas que brillan con la luz de la ilusión, la emoción y la generosidad de personas increíbles que he ido conociendo en el camino. Podría destacar muchísimas perlas, pero hay tres que este año han brillado especialmente.

Durante este verano he tenido la oportunidad de participar en el campamento del Verano Útil que ofrecen los Misioneros Dominicos- Selvas Amazónicas.
verano-util-testimonio-malabo-4-normalLlevo varios años participando como monitora en el campamento y siempre me ha parecido una experiencia muy bonita y enriquecedora pero quizás este año me llevo un regalo aún mayor. Una tarde, junto a Ana, mi compañera de misión, estábamos pensando qué podíamos hacer con los pequeños del campamento y se nos ocurrió la idea de convertirnos todos en piratas. Organizamos un teatro, teníamos a nuestro Capitán Cristian, nuestra pirata Bibi, nuestra pirata Lulú y a nuestra narradora Ana, debían encontrar un tesoro en la isla perdida.

En ese momento jamás pensé que el tesoro eran ellos y que nos iban a enseñar tantísimo como lo han hecho.

Cristian es un chico que vive en el Orfanato. Lleva muchos años allí y, aunque ya no está estudiando, trabaja en un taller de mecánico. Me sorprendió gratamente que en sus vacaciones quisiera ser monitor en el campamento con los pequeños de Oxford (de 3 a 5 años). Día tras día, se prestó a venir acompañado de una enorme sonrisa para guiar a esos pequeños en sus aventuras.verano-util-testimonio-malabo-5-normal Cada día era una nueva oportunidad para iluminar a esos niños y poder jugar con ellos. Los trataba con tanto cariño y amor que me quedaba embobada mirando cómo les cogía la mano para que hicieran correctamente las grafías, cómo les abría los desayunos o cómo solucionaba los problemas entre ellos. Sus ganas de participar y colaborar en todo eran desbordantes, ha sido pirata, cocinero, mariposa, gusano, león... Es un adulto, pero con un corazón de niño.

Bibi es una chica que desde que la conozco se ha encargado siempre de gestionar la ropa y el armario del Orfanato. Es increíble ver lo organizada y metódica que es en esa labor.verano-util-testimonio-malabo-3-normal Actualmente está realizando un curso de cocina y este año en sus vacaciones ha estado colaborando con nosotros en el campamento de Verano Útil. A Bibi le encanta la música; mueve sus caderas sin parar, baila, canta y se evade como si la música la llevara a otro lugar. Los últimos días tuvo la oportunidad de prepararles un baile a los pequeños y lo repetía de forma incansable, preparaba canciones con las vocales y muchos juegos para entretenerlos. A pesar del cansancio, no ha faltado ni un solo día y ha sido un regalo ver cómo disfrutaba y se relacionaba con otros monitores del campamento. Bibi es otra perla que estaba escondida en su concha y este verano para mí ha brillado como nunca. Me quedo con esos abrazos que me dejaban sin respiración.

verano-util-testimonio-lourdes-6-normalQueda una tercera perla que no puedo dejarme atrás, Beatriz. Ella tiene 15 años, pero es como si tuviera muchos más, tiene una madurez asombrosa para su edad.
En vez de dedicar el verano a descansar, ha querido ser voluntaria y dedicar su tiempo a compartirlo con nosotras y los pequeños de Oxford. Es responsable, organizada y cariñosa. Preparaba juegos y actividades con cariño y era capaz de manejar al grupo perfectamente ella sola. Ella brillaba con luz propia.

Cristian, Bibi y Beatriz son tres de esas perlas especiales de Malabo que me han enseñado mucho. En medio de la sencillez han encontrado la manera de brillar con una luz propia, aportando alegría y energía a todos los que los rodean.

verano-util-testimonio-malabo-2-normalGracias a Misioneros Dominicos- Selvas Amazónicas por esta oportunidad de vivir un verano diferente.

Lourdes Álvarez
Voluntaria Misionera en la Misión de Malabo, Guinea Ecuatorial