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El Blog de Misioneros Dominicos - Selvas Amazónicas

Belén cuenta su día a día en El Seybo

Belén relata su día a día el pasado verano en El Seybo, Rep. Dominicana, donde ya lleva colaborando 4 años en distintas ocasiones.

Y Bienaventurada y Feliz volvió a Madrid, dando gracias a Dios por las experiencias vividas, a los frailes y a la gente por su acogida, y consciente de la suerte que es compartir con toda esa gente de espíritu pobre que construyen cada día el Reino de Dios.

Y desde Selvas Amazónicas le damos gracias a ella por su gran entrega a nuestras misiones.

Muy buenas a todos!

Aquí felices, mañana vamos a la capital y pasado a ¡¡¡Haití!!! No sabía que me hacía tanta ilusión ir allí :D, pero estoy deseando conocer el orfanato que tienen allí los dominicos, al famoso Padre Junior y sobre todo a los niños. Volveremos el lunes o el martes :D ¡¡¡ya os contaremos!!!

El otro día en la cárcel, estuvimos reflexionando sobre distintos personajes en la Biblia, cómo éstos se habían encontrado con Jesús y cómo habían cambiado después... Empezamos con el ciego Bartimeo, y al acabar uno de ellos nos dijo que ellos eran los ciegos del camino, y que Dios nos había mandado allí a nosotras, para que volvieran al camino, escucharan la Palabra y se encontraran con Él...En realidad creo que el envío es mutuo, allí se siente a Dios tan cerca...Después hablamos de Pedro, y uno nos decía que qué pasaba si te convertías y luego volvías a caer...se dejan llevar demasiado por el juicio y poco por el amor...Dios siempre nos recibe con los brazos abiertos, no puede más que amarnos...

El sábado tuvimos un taller sobre trabajo en equipo y comunidad con la pastoral penitenciaria y disfrutamos bastante, aunque tuvimos la mala suerte de que llovió (según una de las señoras decía que hacía ¿¿¿frío???) y muchos faltaron. Pero los que vinieron lo aprovecharon, así que contentas. Hoy tuvimos uno de reciclaje con los chicos becados de selvas amazónicas, hay un chico que le han dado un premio, y le encanta compartir su talento y enseñar a otros, eso sí a ritmo dominicano total, lo que iban a ser dos horas, se convirtieron en cuatro jeje pero los guacamayos hechos con cartón quedaron preciosos. Una de las chicas me regaló el suyo, a mi me dio mucho apuro con lo que les había costado...pero me dijo que era un regalo y lo acepté. Son tan cariñosos.

Continuamos con las visitas a las familias de los becados, muchos de los padres agradecen que se les aligere la carga que ellos sólos no podrían cargar...¿Cuándo nos daremos cuenta, que compartiendo llega para todos? Hoy me lo recordaba el Magnificat: “su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. Él hace proezas con su brazo, dispersa a los soberbios de corazón, derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes. A los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos.” Seamos ricos en compartir lo que tenemos.

Y por supuesto, celebramos Santo Domingo, ¡Felicidades a todos los que formáis parte de esta gran familia! el jueves celebramos una Eucaristía en el campo de Caciquillos por ser su patrón, en la radio estuvieron hablando Cecilio, Maite y Raquel; el domingo con los laicos, las monjas y los frailes, eucaristía, reflexión y comida y el lunes en laudes y vísperas. Después de 800 años, no era para menos jeje Santo Domingo, ese hombre que impulsó la predicación haciendo caso al mandato de Jesús “id al mundo entero y proclamad el Evangelio”, a través del Estudio de la Palabra y la continua oración, siempre compartiendo en comunidad. Que sigamos alumbrando el mundo con la antorcha de la Palabra y la vida hecha entrega a favor de los que nos necesitan. Esta orden que me ha dado tanto, y ha hecho que llegue a ser lo que soy; me ha hecho mejor y más feliz, pero también más fuerte; y a la que estaré eternamente agradecida.

Como véis cada día tiene su propio afán, no hay dos días iguales y eso hace que el día siempre sea interesante.

El otro día nos fuimos a Santiago de los Caballeros, que se celebraban las fiestas patronales en la parroquia de los dominicos y allí fuimos a compartir con ellos. De camino, en la capital pasamos a ver a un amigo del Padre de Miguel Ángel, que era dueño de unos grandes almacenes, y el día anterior hubo un incendio y se le quemaron todos los productos y el edificio estaba medio derruido...sólo de verlo daban ganas de llorar...el estaba destrozado pero bastante sereno, entre silencios entrecortados, iba contándonos todo lo que se había quemado, agradeció la visita, en estos momentos, Miguel Ángel le dijo, que el fuego no queme ni tu cabeza, ni tu corazón, y que tenía que volver a empezar y hacerlo mejor y más bonito, esperamos que así sea. Estos frailes siempre están atentos a consolar, acompañar, dar esperanza...es una suerte compartir con ellos... “Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados”

Allí en Santiago disfrutamos mucho, la parroquia está formada por una comunidad muy viva, la misa es una verdadera fiesta, lo preparan con tanto detalle que da gusto...es de las pocas cosas a las que llegan antes de la hora, cada día predica un fraile distinto, sólo por escuchar las homilías, mereció la pena el viaje, fruto de la contemplación de la Palabra y la vida, celebrando los 800 años de los dominicos. En esa parroquia tienen siete coros, cada día cantaba uno, la celebración la preparaban entre dos grupos (las ofrendas, los lectores...) todo preparado con mucho cariño; se notaba la presencia de ese Dios vivo que nos acompaña y disfrutamos de la fraternidad y del Evangelio hecho vida en comunidad :D una buena forma de “Haced esto en memoria mía”.

Creo que no os he contado, que en enero, hubo unos desalojos aquí en El Seibo, había unas 60 casitas de zinc, pegadas a unos campos de caña de azúcar de Central Romana, pero el suelo es del Estado...el 26 de enero a las 3 de la madrugada, fueron un grupo de personas de esta multinacional, y tumbaron las casas, causando terror y miedo en las familias, que tuvieron que huir...ahora cada uno vive donde puede, pero siguen luchando para que se haga justicia, no pueden abusar de esa forma y quedarse tan tranquilos. El problema, es el poder que tiene esta multinacional y el miedo de la gente. Miguel nos llevó a ver los restos, que ya estaban casi ocultos, pero nos encontramos con una de las señoras desalojadas. Nos dijo cosas durísimas como que “la caña de azúcar estaba por encima de las personas” (demasiada avaricia y poca humanidad) o que “No tenían a nadie que les defendiera” (el miedo a la multinacional, esta por encima de la compasión de estar al lado del que sufre; sabiendo que lo que han hecho es una injusticia). Radio Seibo, apoyó a estas familias, hizo un manifiesto precioso (os lo adjunto, porque merece la pena leerlo) contó la verdad y sigue apoyándolos en sus decisiones y luchas. Pero queda mucho por hacer, si se va por la vía judicial, hay que conseguir un abogado que sea capaz de plantarle cara a una multinacional que tiene mucho poder, y como aliados, a todos los que os podáis imaginar...pero hay que hacerlo, para liberarles de esta esclavitud en la que viven tantas personas...tanto en el trabajo de los bateyes, como en el abuso de poder que hacen sin respetar los derechos humanos. La líder de estas familias, nos decía, nosotros somos pobres, no vamos a perder nada, no nos queda otra que luchar...“Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados” “Bienaventurados los humildes, porque ellos heredarán la tierra”, “Buscad el Reino de Dios y su justicia, y lo demás se os dará por añadidura”.

Y Bienaventurada y feliz, me vuelvo a Madrid, dando gracias a Dios por las experiencias vividas, a los frailes y a la gente por su acogida, es una suerte compartir con toda esta gente de espíritu pobre que construyen cada día el Reino de Dios :D

Un abrazo grande
Belén

Pd: Tenemos una muy buena noticia, hoy han empezado a construir el centro médico Fray Luis Oregui de especialidades. Mucha gente no tiene recursos suficientes, para ir a la capital (pagar pasaje, comida...) para hacerse las pruebas, y gracias a Dios, y a las ayudas de mucha gente, esperamos que en cuatro meses todos puedan hacérselas allí.